Con mucha frecuencia, cuando le hablo a alguien por primera vez de mi profesión, le cuento que estudié traducción e interpretación con la firme intención de hacerme intérprete y viajar por todo el mundo aunque he acabado siendo traductora autónoma y apenas salgo del despacho de mi casa. El gusanillo de los viajes lo sigo conservando, eso sí. Y pese a que no lo hago ni la mitad (¡ni la décima parte!) de lo que me gustaría, por circunstancias de la vida he tenido la suerte de visitar unos cuantos países e intento atesorar cuantas imágenes puedo de esos viajes. Acaparo imágenes, libros y ovillos de lana. Mis pequeños homenajes al síndrome de Diógenes.
Las fotografías de este número provienen de varios países y de diversos momentos de mi vida, pero todas tienen en común que recogen algo especial para mí, una imagen que en ese instante me cautivó, una persona que me intrigó. Recuerdos de la belleza indescriptible de la inmensidad del Serengueti, de la frustración de no ser capaz de captar el esplendor que tenía ante los ojos, de la risa de los niños en la India, del corazón dividido en Etiopía entre la magnificencia de las montañas y la pobreza de las aldeas, de las aguas del Índico de unos azules cuya existencia desconocía… No sé nada de fotografía y no tengo más que una cámara compacta, pero espero que lo que yo vi a través del visor antes de apretar el disparador os llegue también a vosotros.
Blanca Rodríguez
Estudió Traducción e Interpretación en la Universidad de Vigo y es traductora autónoma desde 2001. Fue finalista del X Premio Esther Benítez por la traducción, con Marc Jiménez Buzzi, de La constelación del Perro, de Peter Heller. Ha sido juntera de AGPTI, jefa de redacción de la primera época de La Linterna del Traductor (2002-2004), tutora del programa de prácticas de Asetrad, y ahora colabora con el programa de mentorías de esa asociación para orientar a los nuevos socios. Habla de traducción allí donde la dejan y ha traducido a autores como Joseph Conrad, Robert L. Stevenson, Ursula K. Le Guin o James Tiptree Jr. También escribe cuando puede, y su libro Las aventuras de Undine. La gran tormenta (Bambú) lleva vendidos 5000 ejemplares. Ahora trabaja en la continuación y en su primera novela para adultos.