Ahora que celebramos el décimo aniversario del nacimiento de Asetrad, en esta primera intervención pública de la revista hemos querido hacer hincapié en un activo de la asociación que, si bien no lleva diez años como portavoz de Asetrad, desea estar a la altura de las circunstancias y llegar a cumplir, por lo menos, los diez años en esta su segunda época. Estamos aquí para hablaros de la revista oficial de la asociación, La Linterna del Traductor, también llamada familiarmente La Linterna. O, como nos gusta decir, la revista de Asetrad, pero no solo para Asetrad. En esta ponencia hicimos un repaso de sus orígenes, hablamos de nuestras características en el presente y explicamos a dónde queremos llegar en el futuro.
Primera época de La Linterna
La Linterna nació antes que Asetrad, a primeros de 2002, a raíz de una iniciativa que surgió en la lista Traducción en España de RedIRIS e impulsada por el creador y entonces moderador de la lista, Alberto Ballestero, quien además es socio de honor de Asetrad y miembro del consejo editorial de La Linterna. El nombre de la revista surgió por una broma en la lista, ya que por aquel entonces se había popularizado en España una revista de distribución gratuita llamada La Farola. Aquella aventura que ahora llamamos «La Linterna, primera época» duró dos años y medio y dejó nueve números que todavía hoy se pueden leer en las páginas de RedIRIS. Se trataba de una publicación editada por voluntarios y que no contaba con el apoyo de asociación alguna. Aquella iniciativa cerró su redacción por falta de manos en agosto del 2004, un año después de que naciera Asetrad, sin que entonces tuviera nada que ver con la asociación.
El renacimiento de La Linterna
Pero, conforme Asetrad iba creciendo, cada vez era más patente que necesitaba tener un vehículo mediático que la representara y que se proyectara fuera de la propia asociación, ya que los boletines para los socios eran un buen vehículo interno pero no llegaban al resto de un público objetivo muy numeroso y heterogéneo. Fue en la asamblea del año 2008, en Barcelona, en la charla que siguió a una conferencia dada por nuestro socio de honor Fernando Navarro, cuando surgió públicamente el tema de la necesidad de tener una revista, y cuando María Barbero, socia fundadora de Asetrad, que ya había pertenecido tanto a la junta de la asociación, como al equipo de la primera época de La Linterna, pidió la palabra y comentó que para qué crear otra publicación, si ya teníamos aquella. Se habló con su «propietario», Alberto Ballestero, quien cedió a la asociación el ISBN de la revista. Como el movimiento se demuestra andando, María Barbero se ofreció a dirigirla, en un rapto de generosidad y tal vez de inconsciencia (del que esperamos que no se haya arrepentido). Beatriz Pérez Alonso fue la elegida para secundarla en la jefatura de redacción.
La actualidad de La Linterna,
en cifras
Números publicados: 9
N.º de redactores: > 160
N.º de otros colaboradores (jefes de sección, maquetación, etc.): > 20
N.º de artículos: > 260
Idiomas publicados hasta la fecha: 8 (alemán, catalán, francés, gallego, inglés, italiano, portugués) (*)
(*) No depende de nuestra decisión, sino de la voluntad de los autores.
El primer número salió, contra todo pronóstico y con un gran alarde de esfuerzo, en junio del 2009, con una imagen y unos contenidos que no recordaban demasiado a aquella primera época de La Linterna, pero que seguían teniendo el espíritu de esta (pluralidad, dedicación y frescura). Aquel primer número superó las más alocadas expectativas, tanto de calidad como de recibimiento por parte de socios y no socios.
Antes de poder realizar el segundo número, Beatriz Pérez tuvo que dejar su actividad en la publicación, y ella y María Barbero pensaron en esta que suscribe para tomar el relevo. Llevada de la euforia, por el entusiasmo de ver aquel primer número, y con algo de nostalgia, ya que yo también había participado en la primera etapa de La Linterna, yo también tuve un arranque generosidad e inconsciencia, y dije que sí, pensando que seguramente aquello sería algo temporal, mientras encontraban a otra persona más apta.
El equipo humano
A lo largo de estos nueve números, hemos reunido un fabuloso equipo de colaboradores. Al frente de cada sección hay un encargado que se ocupa de coordinar con la redacción los contenidos, y tenemos una plantilla de voluntarios para las labores de maquetación, corrección en los distintos idiomas, ilustración y coordinación, además de un consejo editorial de lujo. No incidiré aquí en los nombres de todos ellos, puesto que pueden leerse en el pie de imprenta de cada número. Por cierto, que no me resisto a hacer un comentario al margen: no deja de ser curioso que muchas de las personas que participaron en la primera época de la revista hayamos participado de una forma u otra en la segunda etapa o «etapa Asetrad». Somos los que llamamos «los reincidentes» y un buen ejemplo del dicho aquel de que «la cabra tira p’al monte».
Formato y edición
Desde un primer momento, nuestra revista siempre ha tenido vocación de ser una publicación gratuita y de difusión web, porque somos conscientes de que es el formato ideal para lograr una amplia difusión y de realizar un servicio público… por no mencionar que es ecológico y rentable. Por eso hemos puesto especial énfasis en realizar la maquetación en distintos formatos (HTML, PDF, ePUB y MOBI) que se adapten a los distintos soportes actuales, desde el ordenador de sobremesa, hasta el portátil, pasando por una tableta, un teléfono móvil o un libro electrónico. La Linterna tiene su propia dirección web (www.lalinternadeltraductor.org), patrocinada por Asetrad. No obstante, nos resistimos a renunciar a una posible impresión en papel. Así, la revista está maquetada cuidadosamente en PDF, de forma que, si se desea, se puede editar en papel o imprimir, lo que le da un aspecto de «revista de verdad» que los lectores valoran positivamente. También cuidamos la parte gráfica, con ilustraciones y fotografías propias, siendo tradicional que cada número lo ilustre con fotografías o dibujos un colega traductor, corrector o intérprete, lo que convierte a la revista también en una plataforma para dar a conocer las habilidades artísticas de los colaboradores.
Señas de identidad
La Linterna del Traductor tiene unas características bien definidas, que se pueden resumir en las siguientes señas de identidad:
- Para todos: es la revista de Asetrad, pero no solo para Asetrad. Está abierta a todos los lectores y a todos los colaboradores: a traductores, intérpretes y correctores.
- Trabajo voluntario: presumimos de que todas las colaboraciones, desde la maquetación hasta los artículos o las ilustraciones publicados, sean estrictamente voluntarias y desinteresadas, y de que nadie en La Linterna reciba remuneración alguna por su colaboración. Esto, que podría parecer algo sin demasiada importancia, es relevante de cara al punto siguiente, que es posiblemente el más significativo.
- Libertad editorial: si bien Asetrad patrocina la revista, los miembros del equipo editorial, desde la directora hasta el último colaborador, tenemos una absoluta independencia de criterio y publicamos lo que el equipo considera oportuno y digno de publicarse, y no aquello que se nos dicta desde Asetrad. Para cumplir con nuestro cometido de ser el reflejo de la asociación tenemos una sección dedicada a Asetrad y que se llama «La voz de Asetrad» (la sección en la que se publica esta reseña), pero incluso en esta sección se tiene en cuenta la opinión de la redacción, y el contenido se coordina con el equipo de dirección y redacción. Nuestra línea editorial independiente se refuerza gracias a que no recibimos remuneración alguna por parte de la asociación. Eso nos permite tener columnas como «El dedo en el ojo» y un artículo editorial en el que nos expresamos de forma libre y no siempre complaciente. Igualmente, nos deja vía libre para que reclutemos a quienes consideremos oportuno, independientemente de su procedencia y de si se trata o no de socios, si bien lógicamente sentimos un orgullo enorme cuando nos llegan buenos artículos de socios y podemos publicarlos, porque es en esos momentos en los que nuestra función se cumple por partida doble.
- Multilingüe: nos gustaría publicar en más idiomas, por ejemplo: euskera, ruso, danés, árabe, japonés… No obstante, eso no depende de nosotros, sino de que haya autores dispuestos a escribir en esos idiomas. Por nuestra parte, estamos abiertos absolutamente a todas las posibilidades.
- Seria y lúdica: deseamos formar, pero también entretener. Nos hemos dado cuenta de que no es imprescindible tener solo un registro académico o «formal», porque cada lector tiene momentos en los que busca algo profundo y momentos en los que agradece una lectura más amena y distendida para, por ejemplo, rellenar un descanso en la jornada laboral. Los comentarios y las estadísticas de las visitas a nuestras páginas parecen avalar que los lectores valoran por igual los contenidos académicos o prácticos (como la sección «Tecnología») y los contenidos más ligeros, como las reseñas bibliográficas o los artículos sobre las actividades extralaborales de nuestros colegas. Asimismo, hemos podido constatar que tenemos lectores que no son necesariamente traductores, intérpretes o correctores, sino personas con inquietudes intelectuales que disfrutan con la lectura de muchos de nuestros artículos.
- Moderna: para incorporar temas nuevos y de actualidad y formas nuevas de llegar al público. Lamentablemente, nuestras ideas van por delante de nuestros recursos, pero siempre estamos buscando la forma de no quedarnos atrás tecnológica o temáticamente. Actualmente estamos trabajando en una remodelación de la revista, que iremos poniendo en práctica poco a poco, y en reforzar nuestra presencia en línea a través de los distintos medios sociales (Twitter, Facebook…).
- Multitemática: en vez de especializarnos en un tema concreto, como traducción médica o literaria, intentamos llegar a temáticas muy diversas, lo que normalmente nos complica la existencia, pero gracias a nuestros estupendos y dedicados jefes de sección, personas conocedoras de las distintas áreas, estamos logrando una variedad que el lector agradece.
- Participativa: concursos, nueva sección literaria, para quienes quieran utilizarnos como escaparate o plataforma para publicar sus escritos, entrevistas, semblanzas de traductores, intérpretes y correctores que tienen intereses distintos a los de la propia profesión…
Quiero colaborar o publicar: ¿Qué hago?
En primer lugar, aunque entre los colaboradores de la publicación somos mayoría los socios de Asetrad, estamos abiertos a cualquiera que desee arrimar el hombro, siempre que se respete nuestro carácter de «revista oficial de Asetrad». Hay muchas formas distintas de colaborar, desde enviar un artículo (véase el recuadro con los requisitos) hasta ofrecerse para hacer fotos en un congreso o una ponencia, pasando por encargarse de una sección o incluso proponer nuevas secciones o contenidos. Si alguien siente el gusanillo de la militancia, puede enviarnos un mensaje a redaccion-linterna@asetrad.org o hablar directamente con cualquier persona del grupo de dirección y redacción. Estaremos encantados de escuchar vuestros ofrecimientos.
Quiero publicar: ¿Qué hago?
- Enviar propuesta a jefes de sección o a redaccion-linterna@asetrad.org
- Indicar:
- Breve trayectoria profesional
- Resumen del artículo propuesto
- Idioma en el que estará escrito
- Plazo necesario para realización.
Requisitos de los artículos
- Originales e inéditos
- Publicación en exclusiva (*)
- En cualquier idioma
- Temática variada relacionada con
- Traducción/interpretación
- Corrección
- Longitud: consultar cada caso.
(*) Salvo acuerdo expreso con la redacción.
Qué ofrecemos
Por nuestra parte, no podemos ofrecer remuneración alguna, pero sí momentos emocionantes, como cuando a pocos días de empezar a maquetar nos quedamos sin ilustrador o cuando en el último momento nos anuncian que no estará listo un artículo que ya incluso figura en el índice. También podemos ofrecer una gran visibilidad: colaborar con La Linterna equivale a poner un anuncio bien grande y que perdura, una ventaja nada desdeñable. Por último, están la satisfacción y el orgullo de hacer algo desinteresado y útil. Esta última ventaja es la más valorada por la mayoría de los colaboradores fijos.
El futuro
¿Qué esperamos del futuro? Nuestras aspiraciones son ambiciosas. Nos gustaría convertirnos en una publicación de referencia y de prestigio, con una trayectoria sólida y en la que los autores deseen publicar. Nos gustaría llegar a un público más amplio y no limitarnos a un solo idioma. Asimismo, estamos trabajando en mejorar nuestros formatos y nuestras páginas web, y buscamos nuevas formas de estar en contacto con los lectores.
Pero, sobre todo, nuestra mayor ambición es sentar las bases para que en el año 2019, y muy probablemente, a manos de otro equipo, esta revista llegue a cumplir su X Aniversario.
Mientras tanto, gracias a todos los lectores por su seguimiento y su apoyo.
Isabel Hoyos Seijo
Traductora del inglés al español y correctora de español de temas científicos y
técnicos en general, aunque sus principales especialidades son el marketing y el
autismo, ámbito del que lleva traducidos y corregidos un buen número de libros. Socia de Asetrad desde sus inicios, formó parte de la junta directiva de Asetrad en el período 2019-2023 y fue jefa de redacción de La Linterna en el período 2010-2014. Es su directora desde enero del 2015.